sábado, 28 de julio de 2007

Una que otra perla: Mi vida y el Reggae

No recuerdo bien si fué en el año 1999 (un amigo siempre me dice que fué en el 2000), la verdad la fecha no importa ya, pues descubrí una música que a mi parecer es increíble, que combina todos los estilos musicales existentes y que incluso cambió mi vida. Señoras y Señores, me refiero al REGGAE.

En ese entonces yo era muy precoz, tenia solo 12 años pero me gustaba juerguear y disfrutar con mis primos y amigos mayores en mi hogar del balneario de Huanchaco. Olas, sol, tranquilidad, desenfreno juvenil y una amplia gama de especímenes fabulosos con cuerpos increibles y rostros hermosos: mujeres, bueno, con ilimitadas excepciones. Era un dia de setiembre, cayó la noche y solo habiamos sobrevivido un pequeño grupo unido por la algarabía del momento (seré sincero, estuve jugando play station toda la tarde y no bebí nada, además, me daba miedo emborracharme, no tiene nada de malo, no?), en fín, era ya de madrugada y la cerveza no existía en nuestras mentes (porque se había terminado), y el buen ron se pasaba con destreza de mano en mano. Lo recuerdo como si fuera ayer, uno de mis primos de nombre Beto se levantó torpemente y puso en el equipo de música un CD que sacó de su mochila, el grupo: UB 40.

No voy a mentirles, me encantó demasiado la musica, el sonido tan pegajoso y la armonía con la que saxofones, trompetas y trombones entraban tan suave y delicadamente en la melodía, los dones vocales del cantante, el mensaje de paz y tranquilidad, así como las ironías de la vida y la protesta y lucha del día a día, eso sumado al suave ritmo que te invita a bailar, o mover tu cabeza y agitar tus labios al expulsar una bocanada de humo (hierba o cigarro, igual da).

Asi sentí por primera vez al reggae, fantástico.